Aston Martin DBR1

Sin duda la llegada de David Brown a
Aston Martin supuso un nuevo giro para la marca británica para las competencias más importantes a nivel mundial como
Le Mans que obsesionaba a la marca británica para conseguir la mejor publicidad para sus bellos deportivos, más de 10 años tuvo que esperar cuando un precioso
DBR1 consiguió la victoria en el año 1959 gracias a una cuidada configuración, el coche apareció en la escena deportiva en el año 1957 y no era más que una evolución de los modelos DB3, el coche fue considerado como el mejor automóvil deportivo de finales de los años 50 en donde conjugaba distintos elementos que lo llevaban a la cabeza.

Destacando su potencia, estabilidad, y frenada en donde la regularidad le hicieron digno vencedor, entre sus elementos destacaban el chasis multitubular con un cuidado sistema de suspensiones traseras independientes con barras de torsión, un juego de frenos de disco en las cuatro ruedas y un motor de doble encendido, en sus entrañas contaba con un 6 cilindros en línea con doble árbol de levas en culata y una cilindrada de 2922 centímetros cúbicos que conseguía una potencia de 265 caballos a 6500 revoluciones por minuto, conseguía una velocidad punta de 270 kilómetros hora gracias también a un peso contenido de tan sólo 800 kilos, el Aston Martin era un digno competidor de marcas como Ferrari mucho más potentes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario